Rumbo a la sostenibilidad

Por qué la posidonia es fundamental para la buena salud de nuestro mar. Entrevistamos al director del IMEDEA, Jorge Terrados

posidonia-baleares

Hemos visitado la localidad de Esporles para conocer más del trabajo que lleva a cabo el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA), y específicamente del proyecto que están llevando a cabo en la bahía de Pollença junto a Red Eléctrica con el que se pretende restaurar dos hectáreas de posidonia oceánica en el fondo marino.

 

El director del Instituto, Jorge Terrados, nos explica en este vídeo la importancia de la posidonia para la salud del mar.

“Se trata de una especie emblemática en el Mediterráneo, endémica, muy importante porque forma praderas submarinas que conllevan grandes beneficios ecológicos, como un aumento de la biodiversidad marina, al tiempo que actúa como un filtro de partículas, absorbe los nutrientes y reduce la suspensión de sedimentos. También atenúa la energía del oleaje y puede llegar a reducir hasta un 50% la altura de la ola, además de ser un sumidero de carbono”.

 

Gran parte de los valores que tiene la posidonia están asociados al hecho de que forma praderas; si fueran plantas individuales que crecen aisladas los valores no serían los mismos. Porque la pradera es una comunidad extensa que genera un hábitat para que otros organismos puedan vivir en ella.

 

En el proyecto que se lleva a cabo en la bahía de Pollença se emplea una técnica innovadora que consiste en el cultivo de semillas de esta planta germinadas en laboratorio y haces procedentes de fragmentación natural para su posterior reimplantación en zonas degradadas de su hábitat natural. Las plantaciones se realizan bajo diferentes tipos de sustrato con el objetivo de conocer cuál es el mejor para su crecimiento y se lleva a cabo un seguimiento periódico para determinar la tasa de supervivencia y el grado de crecimiento de cada planta.

 

Jorge Terrados afirma que el mar balear

“goza de bastante buena salud, especialmente en comparación a otros tramos del litoral. Son unas islas, no hay ríos, no hay una industria, ni minería, ni una serie de actividades humanas que causan que en el litoral del contaminante haya muchos cambios ambientales que son negativos para la posidonia. En Baleares tenemos el agua muy transparente, las praderas de posidionia  contribuyen a mantener esa transparencia, y gran parte de las actividades humanas causan un impacto moderado o pequeño en la posidonia. De hecho Baleares es la región del litoral español donde tenemos praderas de posidionia más extensas y en mejor estado”.

 

Tags: